La primera tarea que debe llevar a cabo un investigador que quiera realizar un buen trabajo es la lectura. Incluso antes de la elección del tema de investigación la lectura es imprescindible para estar al día de las temáticas novedosas y actuales. Leer revistas de impacto (JCR, Scopus) o actas de congresos puede ofrecer un panorama sobre los estudios que se están desarrollando en nuestro campo de investigación y ayudarnos a identificar problemáticas que puedan ser abordadas.

Además, una vez elegido el tema de investigación, es necesaria la realización de una revisión de literatura que sustente nuestro trabajo. «Si he logrado ver más lejos ha sido porque he subido a hombros de gigantes» que decía Newton. Es importante partir de lo que ya está hecho y estudiado para poder ir más allá. Esta revisión bibliográfica nos ayudará a determinar aquello que está estudiado frente a lo que no, a obtener diferentes puntos de vista sobre la misma temática, a adquirir vocabulario específico y técnico, a conocer distintas metodologías para abordar el objeto de estudio, a familiarizarnos con diferentes técnicas y a valorar los resultados obtenidos en otros trabajos y contrastarlos.

De este modo, debemos, en primer lugar, identificar los tópicos de nuestra investigación para poder realizar adecuadamente una búsqueda (consultar la entrada sobre búsqueda por tópicos), decantándonos por los trabajos publicados en revistas de primer nivel y, a partir de ahí, ir descendiendo. Normalmente, unos artículos nos llevarán a otros a partir de sus citas y podremos ir conociendo un panorama amplio de la temática de investigación.

Para más información sobre cómo escribir una buena revisión de literatura pinche aquí

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